La locura ¿existe? Psicastenia
- EMEDELACU

- 16 oct 2023
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Hemos sostenido que, la locura no existe y ha llegado el momento de probarlo; y ahora que se sabe que todo depende y es obrado por el espíritu, podemos sentar científicamente que, aunque exista la perturbación de las facultades mentales, no son locura, del modo, ni de las causas que la locura se ha querido sostener; es decir, que la locura no es una enfermedad física, sino Psíquica. Veamos.
Psicastenia de la raíz griega Psiché, Alma; y de Astheneia, Debilidad.
No vamos ahora a objetar nada sobre el error de que la Psiquis, es del alma: ya hemos probado que el alma no tiene ley y por sólo esto la Psiquis no es del Alma.
Nuestros estudiantes ya saben comprender espíritu en vez de alma y así vamos a exponer el significado de Psicastenia.
“Enfermedad que presenta perturbaciones y anomalías Psíquicas: tienen caracteres Psicológicos, los cuales afectan al entendimiento por la incertidumbre en las ideas; a la voluntad por la vacilación en los actos y resoluciones; y a los movimientos por la dificultad en adaptar el acto interno al hecho externo; la conciencia de la enfermedad ya queda legislada.
Entre otras muchas formas en las que se manifiesta la Psicastenia las principales son la Misofobia; la Agorafobia; la Aicmofobia; la Eritrofobia; la Claustrofobia y la Fobia; lo cual todo en conjunto es, miedo que origina una crecida cantidad de perturbaciones en el alma, por los instintos de que está compuesta y a la vez esta, las comunica por afinidad al cuerpo, porque en él viven los mismos instintos pero animalizados, materiales, de grado más bajo que se purifican para pasar al alma, labor eterna del espíritu.
Por todo esto y sin apoyarnos en Lombroso, que no admite la locura por convicción científica, queda demostrado que la locura no existe, pero sí existe la aberración que causa la perturbación de las facultades adaptadas en el alma, que son del espíritu: y las del cuerpo que, las tiene por su constitución que sólo es, de moléculas e instintos animales de todos los que existen en la naturaleza y al final, sólo es el sentimiento del miedo el que origina todas esas catástrofes de las perturbaciones. ¿Su curación?, se consigue sólo, por la entrada en razón del instinto perturbado: dad la cantidad de fuerza eficiente al espíritu y se acaba la aberración y la llamada locura.
Expuesto esto que es lo capital, vamos a seguir los diferentes procesos estudiados hasta el presente, pues son fruto del trabajo que debemos recoger y recogemos para aprovechar lo que los hombres han experimentado, aún faltándoles el secreto de que sólo el espíritu lo es todo y el único responsable.
Por los estudios Psicológicos y Alienistas, tenemos varias clases de locos, a los que nosotros hemos sustituido con las seis clases de enfermedades que encierra la Psicastenia; pero siguiendo repito, a los experimentos de psicólogos y alienistas, veamos lo que ocurre en los tenidos por locos Impulsivos, morales e intelectuales.
“En los primeros, prescindiendo del género de locura ocurrente, ciertos impulsos adquieren tal intensidad, que los restantes instintos y sentimientos quedan anulados y hasta desaparece la libertad interna, para determinarse en el sentido de las liberaciones racionales”, (esto mismo confirma de lleno nuestra doctrina espírita que es la que inyectamos a la filosofía austera). Sigamos.
“Los impulsos irresistibles se asemejan a las pasiones bruscas y momentáneas, en punto a sus efectos; pero difieren de los extremos del iracundo, del miedoso (sin embargo, la ira, es miedo) y del celoso, en que, el loco impulsivo, tiende a reaccionar y darse cuenta de la perversidad del acto que se ve forzado a realizar (ya hemos dicho en su puesto el dolor, la confusión y vergüenza del impulsivo después de cometer el acto punible y las causas de su comisión).
“El loco impulsivo tiene conciencia del fenómeno que lo domina y no pocas veces intenta prevenir sus efectos, anunciándolos y aun suplicando a otras personas que adopten medidas precaucionales”… (y los llaman locos… ¿No ven que son dominados? Luego la culpa de su comisión no es de ellos. ¿Dónde está la locura?).
La locura impulsiva reviste sus caracteres graves y ofrece enormes dificultades de diagnóstico, cuando el paciente no se da cuenta de las anomalías de su voluntad, como cuando mata o se mata, sin que un proceso mental le revele previamente la naturaleza y consecuencias de sus extrañas y fatales determinaciones (lo cual afirma una vez más que el sujeto está dominado por fuerzas extrañas casi siempre y sólo algunas veces por sus instintos no dominados). Sigue la teoría experimental. “Sin embargo, en tales casos, los impulsos irresistibles son, concomitantes o consecutivos de alguna enfermedad comprometedora del sistema Psico-físico, o precursores de graves accesos de locura, especialmente de parálisis mental; es, pues, muy difícil simular un impulso de ese género, para excusar un acto criminoso”.
“La locura moral se distingue de la impulsiva en que, el instinto o sentimiento perturbado, no es independiente de las reflexiones mentales. El loco impulsivo es arrastrado al acto, aun contra los mandatos de su razón: en el loco moral, el impulsivo pervertido entre como factor en las deliberaciones racionales y el acto es realizado con plena conciencia y aparente libertad, es decir, que entre el loco moral y el impulsivo, media una modificación patológica de los elementos volitivos”.
“El loco intelectual, tiene una idea predominante y perturbadora, como en el loco moral existe un impulso que prepondera en las deliberaciones racionales”.
De modo que, según todas esas teorías experimentales (algunas pasaderas y otras sin ningún conocimiento metafísico) debe haber cuatro grupos de locuras, a saber:
1°. Locura impulsiva moral: en la que una tendencia irresistible se sobrepone a las dictadas por la razón.
2°. Locura impulsiva intelectual: en la que una idea fija y persistente, desaloja todas las que pudieran neutralizar, según ocurre en los perseguidos.
3°. Locura simplemente moral: en la que, las deliberaciones obedecen a la influencia prepotente del impulso moral.
4°. Locura simplemente intelectual: en la que las nuevas ideas se forman obedeciendo a una central, que no es susceptible de ser fiscalizada, como el ejemplo clásico del Quijote.
Estas son las teorías científicas; todas las cuales y con nuestra aclaración Psicastenia, se demuestra eficientemente que la locura debe sacarse de los tratados de medicina, puesto que no existe en lo físico de los cuerpos, y debe sustituirse y la sustituimos de hecho, por Psicastenia que abarca las seis clases de enfermedades anotadas, las que encierran esas cuatro clases de locura, que la ciencia designó.
La perturbación no es de la materia, sino de las facultades mentales y éstas, pertenecen a la Psiquiatría, por lo cual, es de ley eliminar la palabra locura y substituirla por Psicastenia.
Lo abrumador es que, si habríamos de tomar en serio todas las tendencias de tantos desequilibrados Psicólogos, Alienistas, Loqueros o simple médicos, no queda un solo hombre que no sea loco, bajo sus pretendidas técnicas, que no son más que amaños de los científicos.
Hemos expuesto las enfermedades que abarca la Psicastenia y decimos que, la locura no existe.
Es verdad, que hasta ahora, no tenían los hombres como idiosincrasia literaria, sino aquello que se vio forzado Jesús a decir, ante la ignorancia científica de su tiempo; “Si os entendéis, hablar como queráis”; pero, hoy no puede ser eso dado el progreso alcanzado en todas las cosas, por lo que hay que decir las cosas como son, y no como se quiere que sean. Para eso cada cosa tiene su carácter definido.
Libro: Filosofía Austera Racional
Autor: Joaquín Trincado
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